Dinámica de seroconversión y seropositividad de SARS-CoV-2 en población no vacunada durante el primero y segundo brote en México

Resumen
La vigilancia serológica ayuda a establecer pautas de reapertura y determinar los niveles de inmunidad en diferentes poblaciones para alcanzar la inmunidad del rebaño. Por esto, existe una necesidad urgente de estimar la seroprevalencia poblacional.
En México, la información sobre casos y muertes relacionadas a COVID-19 es escasa. Además, no hay vigilancia serológica oficial, lo que limita nuestro conocimiento del impacto de la pandemia de SARS-Cov-2. Aquí, informamos la prevalencia de anticuerpos anti-SARS-CoV-2 en 522,690 personas no vacunadas del 5 de julio al 31 de diciembre de 2020.
La seroprevalencia general fue del 32.8% y la más alta en adultos de 30 a 39 años (38.5%) que las personas bajo 20 años (33.0%) o más (28.9%). Además, en una cohorte de 1,655 individuos confirmados a COVID-19 por PCR, encontramos que las personas sintomáticas (HR=2.56) aumentaron la seroconversión que la presintomática. Además, identificamos que los síntomas más discriminatorios para COVID-19, que podrían predecir la seroconversión, fueron anosmia y ageusia (HR=1.70), fiebre, mialgia/artralgia y tos (HR=1.75). Finalmente, encontramos que las personas obesas tenían una seroconversión más baja (HR = 0.53) que las personas sanas, pero lo contrario ocurre en las personas diabéticas (HR=1.39). Estos hallazgos revelan que alrededor de un tercio de los pacientes ambulatorios mexicanos tenía anticuerpos anti-SARS-CoV-2 antes de la vacunación. Además, algunos síntomas mejoran el diagnóstico empíricamente a COVID-19 y a la seroconversión. Esta información podría ayudar a ajustar los esquemas de vacunación y los algoritmos de reapertura y de regreso al trabajo.